Ya han pasado 40 años desde el estreno de Pac-Man, un 22 de mayo en Shibuya, Tokio, en el que se hizo la primera prueba privada con jugadores.

Yo sólo era un adolescente que frecuentaba los recreativos para echar unas partidas a esos juegos electrónicos tan adictivos y que tanto iban a cambiar mi vida, cuando me topé con el «comecocos», como llamamos por aquí por culpa de un anuncio del juego para Atari 2600 en el que le cambiaron el nombre.

Si contara las monedas de 5 duros que me gasté en aquella máquina, seguro que podría comprarme una nuevecita.

Quien vea un dejà vu en esta entrada, felicidades porque eres de mi generación. ¿Habéis encontrado juegos tan adictivos como Pac-Man, Space Invaders,  Manic Miner o Bomber Jack? Poca memoria, muy poca y adicción a raudales.

Quizás, la apreciación de la adicción a un videojuego antiguo no sea equiparable a la de un videojuego moderno. Está claro, que la sensación de hacer algo por primera vez, es única y te deja un sabor de boca que nunca podrás olvidar, porque es tu primer contacto con ese algo tan deseado.

Su creador Toru Iwatani, de la todopoderosa Namco. Distribuido por Midway Games en el mercado americano a principios de los 80.